Diseñar al antagonista no es tan sencillo como parece. A veces, creemos que es el mal absoluto y tenemos que plantearlo de esa manera, pero lo lógico es que el antagonista tenga unos objetivos, motivaciones, limitaciones, habilidades, etc. En definitiva, igual que el protagonista. Mientras más complejo lo presentemos, mejor trabajado estará y nuestra historia […]