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Empezar a escribir puede convertirse en un reto para quien quiere plasmar en el papel las historias que le rondan por la mente. A algunos les sale de manera natural, pero otros necesitan una guía. En esta serie de artículos, irás aprendiendo, de la mano de varios escritores, cómo adentrarte en cada género narrativo para empezar a crear esa historia que siempre soñaste escribir.

El artículo de hoy se centra en la literatura infantil middle grade. Enrique Carlos Martín es escritor e ilustrador. Ha publicado Gustavo y la máquina de montar monstruos y Cero-Cero-Perico, a punto de salir a la venta. Te invito a que te des una vuelta por su página, donde podrás descubrir sus ilustraciones, perderte por artículos relacionados con literatura infantil o conseguir algunas lecturas gratuitas de sus escritos. ¿Quieres descubrir todo lo que está dispuesto a enseñarte?


– ¿Qué es MIDDLE GRADE?–dices mientras clavas en mi pupila tu bolígrafo azul–…¿Y tú me lo preguntas, so bestia? MIDDLE GRADE eres tú, si tienes entre 8 y 12 años.

Porque middle grade no es un GÉNERO, sino un ARCO DE EDAD del público lector. Igual que young adult o new adult, es una manera cool que tienen las editoriales para hablar del público al que va dirigido la obra. Se podría decir PREADOLESCENTES, pero se tiende a pensar que escribimos sobre la aparición de pelos dónde antes no había o quizás de la ampliación de la gama de olores corporales en esta etapa vital.

El caso es que nos van a leer niños y niñas de 8 a 12 años.

Dicho esto, se puede entender que el middle grade abarca todos los géneros literarios que se te ocurran, y también los que no.

Te voy a contar, dado que te empeñas en escribir middle grade, que por eso estás leyendo estas líneas (a no ser que te hayas equivocado de artículo), CÓMO EMPEZAR A ESCRIBIR MIDDLE GRADE, según mi experiencia y punto de vista, así, en general. Con la experiencia y el punto de vista de los demás no me aclaro.

EN EL ÚTERO

Antes de nacer (de forma literaria), para escribir middle grade puedes ir asimilando estas DIFERENCIAS de este público respecto a uno más adulto:

  • El VOCABULARIO lógico según la edad. Puedes meter en tu obra la palabra “anodino”, no la van a entender ni la van a buscar, pero es “insignificante”. Chiste malo de miembros de la RAE. Quiero decir que no importa que pongas palabrejas, si no abusas. A mí particularmente me gusta poner alguna, en plan reto. Además, pueden formar parte de una posible ficha de trabajo para el cole.
  • El RITMO. Esto es importante. Son hijos de su tiempo. Y en su tiempo corren que se las pelan. Como gamos. Solo tienes que ver los dibujos animados actuales. Se acabaron (hace mucho) las largas carreras por el campo de Heidi y Pedro.
    El reflejo en los textos de este asunto, que suelo encontrar como lector (y que también aplico como escritor), pasa por:
    • acortar la longitud de párrafos y capítulos, y,
    • seleccionar las palabras por su rápida comprensión.
  • El IDEARIO o IMAGINARIO. Las referencias deben estar actualizadas. No te digo que hables de Youtubers ni Instagramers que ni tú ni yo seguimos (sí, no fardes. Si conoces la palabra fardar está claro que no lo haces), pero es interesante conocer los intereses lúdicos-festivos que tienen estos enanos, y estar al día en lo posible. De todas formas es conveniente que, en general, las referencias sean atemporales.
  • La CALIDAD DE LA TRAMA. En esto, no hay diferencia. Un churro de trama para el público adulto es igual de churro para el middle grade. No confundas edad con criterio, ellos lo tienen depurado, solo que igual no es el tuyo. Puedes, eso sí, adecuar la complejidad de la trama respecto a la edad.

PRIMEROS PASOS, BABAS Y BALBUCEOS

Me apunto cada IDEA que pasa por mi mente que creo válida para una novela infantil (las no son válidas también me las apunto). De pronto, una se impone. Llama la atención, me da pellizquitos y no para hasta que le echo cuenta. ¡Esa es! ¡Mi próximo libro! ¡Va a ser un éxito!

¡Al ataque!

¿Y ahora?

Suelo seguir haciendo un brainstorming (muy cool también), con lo que voy sacando punta al asunto. Con él me planteo qué aporta esta idea, qué queda resuelto, qué me falta (falta de todo, claro), y trato de centrarme en determinar el TEMA y el CONFLICTO.

Aclararte con el tema te va a dar pie a seguir escribiendo detalles de tu historia y a que tenga coherencia. Aclarar el conflicto te dará una dirección, además de ser, para mí, el elemento que le dará más peso a la historia. De hecho, si no hay conflicto, no hay historia (¿que a ti no te lo parece? ¡uy, tú y yo nos vamos a llevar regular!).

En esta etapa aparecen también:

  • PERSONAJES. Protagonistas, algunos secundarios. Y los malos, claro. A dónde vamos sin ellos. Son casi más importantes que los buenos.
  • ALGUNOS GIROS DE LA HISTORIA. Puedes apuntar cosas sorprendentes, inesperadas o simplemente curiosas que te gustarían que ocurrieran en tu historia. Aunque luego se queden en el cajón, tú apúntalas, nunca se sabe. Para estos lectores, que ocurran a menudo giros o cosas inesperadas les mantiene en la lectura. No tienen que ser físicas, acciones, pueden ser emocionales. Yo veo esta cuestión relacionada también con el ritmo.
  • POSIBLES FINALES. Esto suele ser de lo más insidioso. En el middle grade suele darse sobre todo los finales felices. O por lo menos no muy infelices (agridulces). Yo lo entiendo y lo suelo respetar. Ya tendrán tiempo como lectores adultos de tragar con un final que les amargue la existencia. Pero es todo un reto para un escritor tratar de no repetirse o ser previsible.

DOCUMENTACIÓN. Sí, aunque te parezca muy pronto, yo empiezo a investigar desde el minuto uno. No porque sea un cansino (que también) y me guste fisgonear (me encanta), sino porque me suele aportar mucha información para la historia. Información que agrego a mi brainstorming cool y vuelta a empezar. Aparecen personajes, giros, finales…

PASOS SEGUROS Y ALGÚN BRINCO

Una vez tengo el material de la fase anterior me aguanto las ganas de escribir la historia. Porque la tendencia es de ¡venga ya, vamos al lío! ¡Me arden las puntas de los dedos, necesito aporrear el teclado! ¡venga!, pero eso suele acabar en desastre supino si no he aclarado antes los siguientes puntos:

1. ESTRUCTURA

Trato de esquematizar la estructura de la trama. Aquí tacho y reescribo como un loco peligroso, incluso cuando ya estoy trabajando en la novela. Conseguir hilar toda la trama con equilibrio y buen empaque es una tarea de titanes. O de chinos. O de titanes chinos. Vaya, que cuesta. Así que no escatimo en esquemas.

Una estructura ajustada y clara ayuda al lector middle grade a entender la historia y disfrutarla sin perderse. Y sobre todo te ayudará a ti a escribir sin tener que rehacer capítulos completos porque no cuadran, entre lloros y pataletas. Palabrita.

En esos esquemas reflejo la cronología de cómo llegará la historia al lector, con los siguientes elementos mínimos:

  • CÓMO EMPIEZA LA HISTORIA.
    • Para atrapar al lector desde la primera palabra, trato de crear atmósfera y dar ya una información puntal de la historia. A poder ser, introducir el tema. Hay quien prefiere empezar in media res o por el contrario, dar una primera imagen del prota en su entorno normal, antes de que todo cambie.
  • PRESENTACIÓN de personajes, entorno y pistas sobre de qué va el libro (el dichoso tema).
    • Como mínimo, presento el prota o protas, aunque intento mostrar todo el plantel de secundarios lo antes posible. Y sobre todo no postergar demasiado la aparición del malo o equipo maligno de turno.
    • El tema puede estar implícito en lo que ocurre o incluso que algún personaje lo diga. Para mí es importante que aparezca pronto, ayuda al lector middle grade a comprender en torno a qué gira todo.
  • PRIMER GIRO de la historia: el DETONANTE. Estábamos tan tranquilos y ocurre esto, vaya por dios. Vamos a tener que emprender una aventura. Un consejillo: no tardes tampoco mucho en sacarlo en tu historia. Debe ser el gancho, lo que haga que el lector quiera seguir, y ya te digo que el middle grade no tiene demasiada paciencia.
  • NUDO: aquí apunto todo lo que quiero que ocurra en la historia y los posibles giros que hagan que avance. Esta será la parte de la novela con mayor número de páginas, donde transcurren todos los avatares de nuestros sufridos personajes, queridos y odiados, en pos de un objetivo que se les resiste. Por lo menos hasta que ocurre el:
  • GIRO HACIA EL DESENLACE. De pronto, todo ha cambiado (pero a lo bestia. O mucho, que queda más fino).
  • DESENLACE. ¿Ganan los malos? ¿Ganan los buenos? Tú verás, yo apuesto por los buenos. Eso sí, ganar puede ser relativo. Se pueden perder cosas ganadas y al contrario. Ya te he comentado que el lector middle grade espera siempre un final feliz, pero soy partidario de dárselo un poco abollado, no sé si me entiendes. Creo que lo valoran más así.
  • CÓMO ACABA la historia.
    • Me gusta intentar dejar un buen sabor de boca, tras la aventura. Un capítulo final cortito o un simple párrafo, a poder ser relacionado con el comienzo, que provoque una sonrisa de complicidad.

Sí, puede sonar a una estructura muy sobada. Y lo está. Pero lo está porque funciona. También puedes tratar de contar de otra manera; cambiar la cronología, jugar con la narrativa. Pero no pierdas de vista este esqueleto básico.

2. FICHAS DE PERSONAJES

No suelo hacer una ficha exhaustiva por cada personaje, pero me viene muy, muy, pero que muy bien para escribir la novela tener claro sus virtudes y defectos. Escribo todo lo que me parece importante sobre ellos para la historia, y lo que no pero que puede aportar un poco de realidad. Aquí tampoco escatimo, más vale que sobre.

Es importante plantear con qué características o circunstancias de esos personajes pueden identificarse los lectores middle grade. Si no encuentras nada, revisa, tacha, maldice y reescribe. Será lo mejor.

3. NARRADOR

Hay que elegir el tipo de narrador que vas a usar. Parece algo obvio, pero no lo es (que no). Según el tipo de historia y el tipo de prota que tengas, te puede funcionar uno u otro. Normalmente en la literatura middle grade se dan estos dos:

  • Narrador en tercera persona, equisciente.
    • Este narrador se utiliza mucho en middle grade porque ayuda a la comprensión de la historia. Cuenta lo que ve en ese momento, el escenario, la acción, emociones y pensamientos de cada personaje, desde un punto de vista neutral. Con esto hay que tener cuidado: para mí, cuando un narrador equisciente toma partido o aporta una valoración partidista, rompe con la credulidad pactada entre el lector y el narrador. Y eso afecta en general a la calidad de la obra.
  • Narrador en primera persona o testigo, el prota.
    • También se utiliza muchísimo, sobre todo cuando se cuenta con un héroe o heroína con características muy molonas, que puede contar sus propias aventuras. Bien llevado, es la forma más directa de que el lector se identifique con el protagonista. Es el típico narrador de los libros tipo “diario”.

No recomiendo cambiar de tipo de narrador a lo largo de una obra middle grade, afecta demasiado a la claridad, a la comprensión. Aunque sí se puede jugar con otros elementos para conseguir una narración más dinámica, como la aparición de una carta o las hojas de un diario. Para ampliar este asunto te animo que leas el artículo de Celia.

4. GÉNEROS

Cómo ya te dije antes, puedes escribir middle grade de cualquier género. Así que puedes darte una vuelta por este estupendo blog (peloteo) y leer los artículos de esta serie de “Cómo empezar a escribir…”, que son todos prácticos y magníficos (más peloteo), y aplicarlos en su medida al público middle grade.

Pero quería ser generoso y hablarte en general de los géneros (hay algo en esta frase que me molesta). Una vez dicha esta estupidez y quedarme tranquilo, lo que quería apuntar es que suele encontrarse una mezcla de géneros en las historias para middle grade, aunque haya alguno que domine. Estos son: misterio, comedia y romántica.

  • Misterio: a los peques les encanta. Hay algo que descubrir, un personaje que nadie sabe quién es, un hecho que no se entiende, un objeto extraviado. Bueno, a los peques y los otros, porque somos de natural curioso.
  • Comedia: puedes centrarla en un personaje o que toda tu narrativa destile humor, pero creo que es algo que debe contener, en mayor o menor medida, toda literatura middle grade.
  • Romántica: lógicamente, siendo libros para niños de 8 a 12 no debemos explayarnos, pero el puntito de salseo suele ser muy bien acogido por estos lectores. No lo dudes. Yo no lo hago.

¡MIRA, MAMÁ, CÓMO CORRO!

Ya tengo todo lo anterior y me pongo a escribir la novela. Ya ando solito. Bueno, con ruedines. A lo mejor corro menos, pero voy más estable, con caídas menos duras.

Si tú también tienes resuelto todo lo anterior, ale, a correr.

Pero antes de dejarte ir y contemplar cómo te alejas con el asomo de una lágrima de papi orgulloso, haré lo que todo papi hace, en plan pesado: DAR CONSEJOS.

  • Ve dibujos animados. Te dará una idea del ritmo narrativo al que están acostumbrados, además de muchas claves para entender a tu público. Para colmo, te lo puedes pasar pipa. Hay dibujos animados con guiones geniales. Revisa por ejemplo Los mundos de Gumball y Gravity Falls (lo siento, pero lo más seguro es que te enganches). También cine, por supuesto. Películas con las que los niños flipen. Podrás ubicar con facilidad la estructura básica de la que te he hablado.
  • Lee libros para tu público. Encontrarás autores con un talento especial para hacer reír, emocionar o reflejar una acción trepidante. Cópialos vilmente. Perdón, estúdialos.
  • Habla con los niños, no muerden (casi todos). Pregúntales por sus gustos, lo que ven en la tele, por internet, a lo que juegan… Son la mejor fuente de información.
  • Huye de los estereotipos, es fácil caer en ellos para que este público los acepte, porque están muy trillados en literatura, cine y tele que conocen. Pero insisto en que es un público con criterio.
  • Evita (por favor) el deus ex machina. Otra cosa que se repite lamentablemente. Todo es súperinteresante, los héroes están en un lío imposible, y al final aparece algo nuevo que lo soluciona. Vale igual para las historias que en el último capítulo se explica la solución con información que no había aparecido ni en la solapa del libro. Si vas a hacer algo de eso, por favor, mátame.
  • Muestra, en vez de describir. No lo pongas en boca de un personaje o del narrador porque pienses que tus lectores no lo van a pillar con un ejemplo, porque son niños. ¿Qué te he dicho que tiene este público? Sí, criterio. Lo sé, un poco cansino sí que soy (tampoco te pases).

Creo que ya vale, esto era algo básico. Además, tampoco me pagan más. ¡Hasta otra!

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Correctora, maquetadora, mentora y formadora de escritores. Autora de manuales de escritura y novela juvenil. Ayudo a escritores a mejorar y pulir sus textos, y a dejarlos listos para publicar. Les enseño cómo revisar sus libros y todos los secretos de la autopublicación.
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